Unas paredes correctamente aisladas permiten conservar la temperatura interior al tiempo que mantienen a raya el ruido de la calle. Por esta razón, es bueno saber cuál es la mejor forma de aislar las paredes de la casa, para de esta manera disfrutar de un ambiente climatizado sin gastar demasiado dinero.
El consumo energético del hogar depende en gran medida de la eficiencia que tenga el sistema de climatización. En este sentido, actualmente muchas familias están optando por la llamada energía verde para disminuir el impacto ambiental y reducir el monto de la factura de electricidad. Sin embargo, la instalación de un sistema de paneles solares o cualquier otro tipo de fuente ecológica implica una inversión inicial alta, por lo que es fundamental saber cómo aislar una pared para evitar la pérdida de calor, de modo que el gasto valga la pena.
Podemos decir que en líneas generales los aislantes térmicos para paredes interiores son fáciles de instalar, pero también es cierto que el nivel de dificultad puede variar. En esta oportunidad, usaremos de ejemplo el aislamiento con lana de vidrio y placas de cartón yeso, unos materiales muy duraderos que no cuestan demasiado dinero.
Herramientas y materiales para aislar paredes
Para aislar paredes del frío o del calor necesitamos rollos de lana de vidrio y su correspondiente adhesivo especial, también debemos tener las placas de cartón yeso y los tornillos adecuados para fijarlas a la pared. Asimismo, son necesarios canales, perfiles de chapa galvanizada, tacos, cinta resiliente adhesiva, espigas y clips de fijación. En cuanto a las herramientas, es bueno tener a mano un taladro atornillador, una cinta métrica, un tiralíneas, un nivel de burbuja, una regla, un cúter, una tijera de chapa y un lápiz.
Montaje de la estructura
Es importante tomar las medidas de la pared, tomando como referencia los marcos de las ventanas, para esto, debemos utilizar la regla y el nivel de burbuja. A continuación, hay que marcar una línea de referencia para la instalación de los canales en el suelo y en el techo, para esto podemos utilizar el tiralíneas. Es posible fijar los canales del techo y el suelo con tacos cada 50 cm.
Por otro lado, es recomendable colocar un perfil en la pared de forma horizontal, ya sea en la mitad o a una altura de 135 cm si el techo es muy alto. Este perfil debería ser fijado con un tornillo cada 25 cm, por lo que hay que usar el taladro y colocar tacos. En cuanto a los clips y las espigas, deben quedar a intervalos de 60 cm.
Instalación de la lana de vidrio
Lo primero que debemos hacer es cortar la lana de vidrio, por lo que es necesario medir con la cinta métrica (pulsando este enlace puedes encontrar algunas opciones para elegir) del suelo al techo y añadir 2 cm, de modo que la lana quede bien ajustada, además, hay que clavarla en los clips y espigas de fijación. Después, es necesario colocar perfiles verticales utilizando la medida exacta del suelo al techo, para sujetarlos, solo debes ajustar y bloquear cada clip y espiga.
Colocar las placas de cartón yeso
Este es el último paso y suele ser el más sencillo, ya que solo se trata de ajustar las placas de cartón yeso a la pared. Para lograrlo, solo necesitas tornillos especiales para este material y un atornillador eléctrico. Los tornillos deben ser colocados a intervalos de 25 cm y siempre sobre los espacios donde están los perfiles verticales y horizontales.
Tipos de materiales aislantes para las paredes
En el mercado actual existen diferentes materiales para el aislamiento térmico de paredes, y es fundamental conocer las propiedades de cada uno para saber cuál es el más adecuado según las necesidades. Veamos algunos de los más populares.
- Lana de vidrio
Este es probablemente el aislante térmico para pared más conocido a nivel mundial. Se trata de una fibra mineral hecha de arena, vidrio reciclado y otros elementos que son calentados a muy altas temperaturas, para formar hilos de fibra de vidrio más delgados que el cabello humano. El resultado final es muy parecido al algodón. Por lo general, la lana mide 50 mm de grosor, pero existen diferentes presentaciones. Esta fibra viene recubierta de papel madera con revestimiento asfáltico, que es eficiente a la hora de aislar paredes de la humedad, por lo que impide la aparición de moho.
- Espuma de poliuretano
Este material presenta un buen comportamiento térmico y ofrece una buena capacidad de aislamiento con poco grosor. Actualmente, se utiliza el proyectado de espuma de poliuretano, una mezcla de poliol e isocianato, mediante una máquina de uso profesional. En este caso, la aplicación del material debe hacerla una empresa especializada, pero es una buena alternativa para aislar paredes sin obra.
Por otro lado, también es posible encontrar la espuma proyectable en bote, que viene lista para ser utilizada, es fácil de aplicar y está libre de isocianato, por lo que es menos tóxica y se puede usar en espacios cerrados. Gracias a la facilidad de aplicación, este tipo de aislante se usa mucho para los techos. Si quieres saber cómo aislar una pared del ruido, esta también puede ser una buena opción, ya que la espuma de poliuretano presenta una buena resistencia acústica.
- Poliestireno expandido y extruido
También conocido como corcho blanco o poliexpán, este material se utiliza en construcción para evitar que la temperatura se escape por las paredes. El poliestireno expandido es un polímero termoplástico y esponjoso, que a pesar de ser muy resistente, resulta bastante ligero, lo que permite mejorar el aislamiento sin agregar peso a la estructura. Por su parte, el poliestireno extruido es mucho más denso, de modo que ofrece una mayor resistencia térmica y mecánica, además, resiste mejor la humedad, por lo que puede ser la respuesta si te preguntas cómo aislar una pared exterior. No obstante, también es verdad que debido al coste del material colocar poliestireno extruido en la pared puede resultar más caro en comparación con la instalación de poliexpán.
- Lana de roca
Es un tipo de lana mineral fabricada con roca volcánica, que no solo permite mantener la temperatura deseada en el interior de la vivienda, sino que también tiene clasificación A1 en su comportamiento contra el fuego, por lo que retarda la propagación en caso de incendio.
Como podemos observar, existen distintos tipos de aislantes para paredes, es por esto que debemos evaluar cada material y tomar en cuenta nuestras necesidades particulares para tomar la mejor decisión a la hora de hacer la inversión.
DEJA UN COMENTARIO
0 COMENTARIOS